Desde el día 1 de la implementación del plan de vacunación contra el COVID-19 en Nueva York, las autoridades han repetido hasta el cansancio que se necesitan más suministros del Gobierno federal para poder lograr con efectividad la meta de inmunizar por lo menos al 70% de los neoyorquinos. Y aunque son muchas las quejas de personas que ya califican para recibir la vacuna y que no han podido agendar una cita por falta de dosis, a partir de este lunes 15 de febrero, más neoyorquinos podrán aplicar para obtener la inyección.
Este nuevo grupo de personas que podrán “hacer la fila” desde este lunes y solicitar una vacuna está compuesto por aquellos que tengan comorbilidades (condiciones médica crónicas) y afecciones subyacentes como asma, diabetes, cáncer, hipertensión, enfermedad renal, enfermedad pulmonar, obesidad, enfermedad del hígado y otras más.
Y estos que califican por tener una enfermedad seria, pueden ser menores de 65 años, la edad mínima que se estableció en el último grupo de neoyorquinos que son elegibles para recibir una dosis.
Y aunque personas como María Hojas, quien estuvo luchando todo el año pasado contra un cáncer de mama que le descubrieron en plena pandemia del coronavirus, se alegró de saber que ya califica para hacerse vacunar, teme que al final tenga que esperar más atrás en la cola.
La ecuatoriana de 59 años, quien en diciembre pasado terminó sus radiaciones contra el cáncer, se mostró frustrada y muy preocupada al escuchar con sus propios oídos que en puntos de vacunación cercanos a su casa en East Elmhurst, como el Citi Field del Parque de Flushing, no hay dosis disponibles para personas que están en categorías aprobadas antes que la suya.
“Yo ya califico para vacunarme, y en todas partes donde uno llama o donde mi esposo va para buscarme una cita, no hay nada disponible. Siento que están mintiendo porque abren más categorías y no hay vacunas”, dijo la mujer, quien trabaja en Nueva York como cuidadora de enfermos y ancianos desde hace 16 años. “Yo además tengo problemas en la columna y quiero vacunarme para estar más tranquila porque sé que el Covid ha matado a muchos, pero sé que mucha gente enferma no va a poder vacunarse todavía porque hay mucha desorganización. Habra que tener fe, porque sin fé que somos“.
Su esposo, Félix Hojas, compartió el temor de su mujer y dijo que dado el elevado riesgo que representa la condición de su compañera de vida, han optado porque ella permanezca casi todo el tiempo encerrada en su casa y es él quien trata de agendar una cita, y no ha sido posible.
“Mi esposa califica ya por ambos lados, uno por el cáncer y dos porque ella trabaja como ‘home attendance’, entonces ya podría estar vacunada para poder retomar su trabajo, pero ni siquiera así ha sido posible conseguir que le pongan la vacuna”, dijo el frustrado inquilino de Queens.
Con más esperanza, pero confesando que hasta que no arranque bien el proceso de vacunación para los pacientes con comorbilidades y enfermedades subyacentes no podrá saber a ciencia cierta si será un “suplicio o algo fácil”, el colombiano Hernán Gómez, confesó que con emoción estaba contando los días para poder hacer una cita el 14 de febrero, fecha dada por la Gobernación para que los neoyorquinos de su categoría de vacunación pudieran empezar a buscar citas para recibir un sitio y hora para ir esta próxima a ser inmunizado.
Fuente: El Diario